miércoles, 5 de octubre de 2011

CENTRO COMERCIAL ARENAS DE BARCELONA




INTRO

Ubicación: Plaça de Espanya, Barcelona

Fecha de inaguración 24 de marzo de 2011

Superficie alquilable 30.940 m2

Superficie construida 106.250 m2

Plazas de parking totales: 1.750 plazas (500 de ellas para motos)

Número de locales 115 locales y 12 salas de cine

Número de plantas: 6 comerciales y de ocio y 4 de parking subterráneo

Presupuesto final: Entorno a 200 millones de euros

http://www.arenasdebarcelona.com/

Popularmente llamada “Las Arenas”, este edificio fue durante muchos años el primer gran coso taurino barcelonés. El 9 de junio de 1977, “Las Arenas” celebró su último espectáculo taurino y, tras varios años de silencio, vuelve de nuevo a su ciudad con su antiguo y evocador nombre: Arenas de Barcelona.

El edificio original, que albergaba la antigua plaza de toros, era de estilo neomudéjar y fue construido el año 1900. Su arquitecto fue Augusto Font i Carreras y era uno de los primeros edificios representativos que se veían al entrar la ciudad.

Tras muchos años de inactividad, los estudios de arquitectura Richard Rogers Partnership (www.richardrogers.co.uk) y Alonso - Balaguer Arquitectos Asociados (http://www.alonsobalaguer.com/flash.html ) recibieron el encargo de transformar la antigua plaza de toros en un espacio comercial, cultural y de ocio.





DESCRIPCIÓN DEL PROYECTO

La idea del proyecto consiste en mantener la envolvente exterior del edificio existente, disponiendo una nueva cubierta en forma de cúpula que se sustenta sobre una estructura exenta a la del edificio original.

La estructura de la cúpula se ejecuta en madera laminada, tiene 92 metros de diámetro y no cuenta con ningún soporte intermedio. Descansa sobre una estructura metálica que a su vez se apoya en 8 pilares metálicos con forma arbórea.

Las instalaciones, núcleos de servicios, montacargas y escaleras de emergencia se ubican en el exterior del edificio para poder acceder fácilmente a ellos, quedando una planta diáfana y con adaptabilidad a futuros cambios funcionales.

Para dar cabida a las nuevas necesidades, además de crear un edificio anejo de servicios y de excavar 4 plantas de aparcamiento, se idea la operación más interesante del complejo, que consiste en elevar la envolvente del antiguo edificio, quedando ésta despegada del suelo y haciendo más permeable la relación del nuevo centro comercial con el peatón. Para poder ejecutar esta elevación de 4 metros con respecto al nivel de la calle de las 4000 toneladas de cilindro existente, fueron utilizados 400 gatos hidráulicos.


fases de elevación de la fachada



El espacio interior tiene un gran atrio central de planta circular que comunica visualmente las diferentes plantas del edificio y queda atravesado por escaleras mecánicas y ascensores panorámicos. En la última planta se dispone una terraza perimetral exterior desde la que se divisa la ciudad y en la que se ubican restaurantes y el espacio bajo cubierta destinado a eventos.




DE PLAZA DE TOROS A CENTRO COMERCIAL

En primer lugar, cabe destacar el esfuerzo por mantener el exterior de la antigua plaza de toros y la obra de ingeniería consistente en elevar la envolvente exterior y en ejecutar de la manera más liviana posible la cúpula del edificio.

En segundo lugar habría que plantearse si una planta circular es la más adecuada o funcional para disponer una superficie comercial, así como el sobrecoste económico que ha supuesto las operaciones anteriormente citadas. No obstante, queda patente la acertada intención de despojar al interior del edificio de excesivos artefactos necesarios para el funcionamiento de un edificio de estas características (montacargas, ascensores, servicios, instalaciones, etc).

Por otra parte habría que valorar si hay una equilibrada relación entre “lo nuevo” y “lo viejo”. Las necesidades estructurales, programáticas y normativas, unidas a la elección de múltiples colores, formas y materiales en los nuevos elementos estructurales, hacen que el protagonismo de la antigua fachada de la plaza de toros (lo viejo) quede reducido o mermado en favor de dichos “nuevos” elementos.

¿Qué hubiera sucedido si se hubiera dispuesto un óculo central que permitiera la entrada de luz natural? Quizá hubiera resultado un espacio interior menos insípido y hubiera deparado al visitante alguna sorpresa agradable más allá de una amplísima altura libre hacia un techo ciego. Por el contrario, si se hubiera abierto el paso a la luz natural cenital, no se hubiera dispuesto la cúpula (al menos no de esa manera) y no sería la cúpula de madera laminada más grande construida actualmente en Europa. Además, no se hubiera podido disponer del espacio multiusos en la bajocubierta, ni seguramente las salas de cine ubicadas en 3ª y 4ª planta, o el gimnasio, pistas de footing y museo del rock ubicados en planta 5ª.

La merma de protagonismo de la fachada antigua en pro del alarde estructural y del espectáculo (para eso es un centro comercial que aspira a ser un icono arquitectónico), continúa con la disposición de un ascensor exterior panorámico que comunica el nivel de calle con la terraza-anillo-exterior de la última planta, previo pago (al menos en verano de 2011) de un euro por la utilización del mismo, que desembarca en una plataforma circular volada y sustentada por un largo (espectacular???) y esbelto pilar.

En definitiva, me resulta difícil calibrar cuál es reclamo. Incluso si realmente el reclamo es turístico o arquitectónico. Probablemente tenga un poco y nada de ambas cosas a la vez.


vista inferior de fachada elevada